jueves, 30 de marzo de 2023

Un hallazgo muy valioso para mí

Hoy estuve reflexionando acerca del futuro de The Art of Wellness (el arte del bienestar). Todos somos artistas del bienestar. Artistas, digo, considerando la definición de arte de John Ruskin: “El arte es expresión de la sociedad”. A cada momento que la vida nos desafía a aprender algo nuevo, a ser alguien que no habíamos sido antes o a hacer algo que no nos imaginábamos capaces de hacer, nuestras acciones van moldeando y expandiendo el entorno en el que vivimos. Algunas veces, la motivación es propia, es decir, trabajamos sobre nosotros mismos por nuestras propias necesidades. Otras, salimos a conquistar el bienestar de alguien más, de alguien cercano a nuestros afectos. “Artistas” también porque se requiere un proceso creativo para lograr el cambio que nos lleva a ser mejores. Comenzando por el deseo de crear algo que no existe aún para mejorar nuestra vida, luego es necesario poner “manos a la obra” y entregarnos a experimentar, indagar, buscar inspiración y técnicas, revisar, corregir el curso, animarnos a ir más allá de lo conocido, probar qué, cuánto, cuándo. En todo esto, nos desplazamos del lugar de que “la vida es lo que nos pasa” hacia el lugar de creadores/hacedores de nuestra vida mediante la acción consciente e intencional de ELEGIR desde lo más pequeño hasta lo más significativo. Una tarea cuyo resultado puede sorprendernos, al igual que otros procesos creativos que emprendamos.

El oro de esta reflexión para mí en lo personal es que reconfirmo una vez más mi compromiso con ser activista del bienestar y acompañar a quienes lo deseen en estos procesos de desarrollo personal. Es mi pasión, que siempre estuvo ahí tomando diferentes formas a lo largo del tiempo y ahora puedo hacer una síntesis que da valor a otros, desde mi propia experiencia personal y desde lo que pude aprender y elaborar para mí misma. Quiero ser esa coach con la que hubiera necesitado conectar en mis búsquedas de bienestar para expandir posibilidades.

Y vos, ¿quién querés ser?

lunes, 20 de marzo de 2023

El mejor consejo que me dieron sobre la importancia de vivir bien (fuera del modo “supervivencia”)

Hace muchos años, cuando yo atravesaba una crisis personal, fui a buscar iluminación en una charla con un viejo amigo. En honor a la verdad, yo buscaba una receta o una guía paso a paso para enfrentar los cambios que necesitaba en mi vida. Temía el dolor y el sufrimiento que eso iba a causar, y quería evitarlo a toda costa. Me amparaba en ese deseo de cuidar los riesgos para no tomar acción y, mientras tanto, seguía viviendo mal, estirando una agonía en modo “supervivencia” y aunque la salud física me daba señales de que la cosa no era por ahí, yo seguía evitando elegir lo que necesitaba. Hoy me río un poco de esa ingenuidad, porque aprendí que dolor y sufrimiento son cosas distintas y también son puntos de vista sobre la realidad que sucede que podemos no elegir e incluso aceptar.

Pero esta persona, desde su gran sabiduría de vivir, me hizo una pregunta inesperada pero totalmente atinada: ¿qué es la vida?

No supe qué responder en pocas palabras, miles de pensamientos se amontonaron en mi cabeza, pero no pude resumir un concepto.

Sus palabras me acompañan desde entonces como un concepto central para elegir siempre lo que resuena en sintonía con eso. Se transformó en una ley vital y ordenadora de prioridades. También conocí entonces la importancia de salir de uno mismo y las ideas propias para ir a hablar con alguien de aquello que nos preocupa y permitirnos escuchar los mensajes que tienen para nosotros. Desafiar nuestros puntos de vista, recibir la ayuda necesitada, soltar patrones de pensamiento y flexibilizar nuestras estructuras para encontrar el crecimiento más allá de esas fronteras.

“La vida es TIEMPO”, dijo. El regalo que tenemos en esta existencia en la Tierra es el tiempo, que es limitado. Lo que elegimos hacer con ese regalo es nuestra responsabilidad. Cuando eventualmente tu tiempo se acabe, ¿qué vas a responder si te preguntan qué hiciste con tu regalo? ¿Fuiste feliz? ¿O pasaste el tiempo sobreviviendo/viviendo mal por el miedo al cambio? ¿Aprovechaste o desperdiciaste tu regalo?

Pensar lo que hay que pensar.

Sentir lo que hay que sentir.

Decir lo que hay que decir.

Hacer lo que hay que hacer.

 

Leélo de nuevo.

Te leo en los comentarios.

Te cuento cómo transformar el veneno en medicina

Hoy me está costando fluir, o más bien, me interpela esta cuestión: cuándo fluir y cuándo poner un límite? Hay situaciones que no se resuelv...